TikTok presentó una demanda para evitar la posible prohibición de la aplicación en EE.UU.

TikTok presentó una demanda este martes para bloquear una ley estadounidense que podría llevar a una prohibición nacional de la popular aplicación. La iniciativa judicial tiene lugar después de que la compañía emitiera amenazas legales luego de que el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, firmara la legislación el mes pasado.

La impugnación judicial representa el comienzo de una batalla legal histórica, que determinará si las preocupaciones de seguridad de Estados Unidos sobre los vínculos de TikTok con China pueden prevalecer sobre los derechos de los 170 millones de usuarios estadounidenses de TikTok, establecidos en la Primera Enmienda.

Lo que está en juego en el caso es fundamental para TikTok. Si pierde, TikTok podría ser prohibido en las tiendas de aplicaciones de EE.UU. a menos que su empresa matriz china, ByteDance, venda la aplicación a una entidad no china a mediados de enero de 2025.

En su petición presentada este martes ante la Corte de Apelaciones de Estados Unidos para el Circuito del Distrito de Columbia, TikTok y Bytedance alegan que la ley es inconstitucional porque reprime el discurso de los estadounidenses y les impide acceder a información legal.

La petición afirma que el gobierno de Estados Unidos “tomó la medida sin precedentes de señalar y prohibir expresamente” la aplicación de videos de formato corto en un "ejercicio inconstitucional" del poder del Congreso.

“Por primera vez en la historia”, dice la petición, “el Congreso promulgó una ley que somete una única plataforma específica de expresión a una prohibición permanente a nivel nacional y prohíbe a todos los estadounidenses participar en una comunidad online con más de 1.000 millones de personas en todo el mundo”.

La Casa Blanca remitió las preguntas sobre la impugnación legal de TikTok al Departamento de Justicia, que no respondió a una solicitud de comentarios.

La demanda llega luego de años de acusaciones estadounidenses de que los vínculos de TikTok con China podrían potencialmente exponer la información personal de los estadounidenses al Gobierno chino.

 

Debate sobre el intercambio de datos

TikTok ha negado rotundamente haber dado acceso a los datos de los usuarios estadounidenses a funcionarios del Gobierno chino y dice que tomó medidas para proteger esa información alojando los datos en servidores propiedad del gigante tecnológico estadounidense Oracle.

Esas medidas son parte de un borrador de acuerdo de 90 páginas ante un panel gubernamental conocido como Comisión de Inversión Extranjera en Estados Unidos, un organismo multiinstitucional que ha estado revisando las operaciones de TikTok en Estados Unidos desde 2019, según la petición. Ese mismo borrador del acuerdo también incluye la capacidad del gobierno de EE.UU. de cerrar TikTok si la app o ByteDance “violan ciertas obligaciones bajo el acuerdo”, decía la petición.

Pero esas garantías no aliviaron las preocupaciones de los funcionarios estadounidenses, que incluyen temores de que China pueda utilizar los datos de TikTok para identificar objetivos de inteligencia, difundir propaganda o participar en otras formas de influencia encubierta.

El gobierno de EE.UU. no ha presentado públicamente ninguna evidencia concreta que demuestre el acceso del Gobierno chino a los datos de TikTok hasta la fecha. Los legisladores estadounidenses recibieron informes clasificados de funcionarios de seguridad nacional a puerta cerrada, pero no desclasificaron ningún material de esas reuniones.

Las reacciones a las sesiones informativas fueros variadas: un republicano de la Cámara de Representantes dijo que no había “información específica (...) que fuera evidencia bien fundada” y un demócrata de la Cámara de Representantes dijo que la cuestión se reduce a una decisión sobre cómo frenar la “influencia maligna” de China.

Pero el senador demócrata de Virginia, Mark Warner, defensor de la legislación sobre TikTok, dijo en declaraciones en el pleno del Senado en abril que las sesiones informativas proporcionaron información crítica sobre el riesgo que representa TikTok.

"Muchos estadounidenses, en particular los jóvenes, son, con razón, escépticos" ante la legislación que toma medidas drásticas contra TikTok, dijo Warner en sus comentarios. “Al final del día, no vieron lo que vio el Congreso. No estuvieron en las sesiones informativas clasificadas que hizo el Congreso, en las que se profundizó en algunas de las amenazas que plantea el control extranjero de TikTok”.

En marzo, esos temores culminaron con una legislación que le dio a TikTok aproximadamente seis meses para vender o enfrentar una prohibición en Estados Unidos. Aprobado por la Cámara, se estancó en el Senado antes de que una versión actualizada del proyecto de ley fuera acelerada y adjuntada a un importante paquete de ayuda exterior que beneficia a Israel y Ucrania.

Los legisladores estadounidenses describieron la ley en cuestión como una desinversión forzada de TikTok, no una prohibición total de la aplicación. TikTok ha insistido, sin embargo, en que una prohibición sería el único resultado probable si se respeta la ley.

"La 'desinversión calificada' exigida por la Ley para permitir que TikTok continúe operando en Estados Unidos simplemente no es posible", decía la petición de este martes, "ni comercialmente, ni tecnológicamente, ni legalmente".

 

Implicaciones de la Primera Enmienda

TikTok y ByteDance calificaron los temores de seguridad nacional, que son el foco de la legislación sobre TikTok, como “especulativos y analíticamente defectuosos”, y agregaron en la petición que la rápida aprobación del proyecto de ley refleja cómo sus autores en el Congreso se basaron en “especulación, no en 'evidencia', como la Primera Enmienda requiere”, para argumentar su caso.

Los expertos de la Primera Enmienda dicen que las afirmaciones de TikTok tienen cierto mérito. La Corte Suprema sostuvo, por ejemplo, que el Gobierno de Estados Unidos no puede prohibir a los estadounidenses recibir propaganda extranjera si así lo desean. Para subrayar este punto, la legislación conocida como enmienda Berman también prohíbe a los presidentes de EE.UU. bloquear el libre flujo de medios de comunicación procedentes de países extranjeros, incluso aquellos considerados hostiles a Estados Unidos.

“Las afirmaciones de seguridad nacional no deberían prevalecer sobre la Primera Enmienda”, dijo Evelyn Douek, profesora asistente de derecho en la Universidad de Stanford que estudia las regulaciones de las plataformas online. “De lo contrario, la Constitución no tendría valor real. Como mínimo, el Gobierno debería verse obligado a proporcionar pruebas de sus afirmaciones. Dicho esto, existe un precedente de que la Corte (Suprema) descuida estos principios, especialmente en el contexto del contraterrorismo y el discurso extranjero”.

TikTok obtuvo algunas victorias judiciales tempranas el año pasado cuando varios estados de EE.UU. intentaron tomar medidas drásticas contra la aplicación, presagiando la batalla que se avecina por el discurso online. En Montana, el único estado que aprobó su propia prohibición de TikTok que afecta a los dispositivos personales, un juez federal bloqueó temporalmente la legislación, y alegó que la ley estatal inconstitucionalmente "dañó los derechos (de los usuarios) de la Primera Enmienda y cortó un flujo de ingresos del que muchos dependen".

La naturaleza bipartidista de la ley que firmó Biden podría convencer a los tribunales de la gravedad de las preocupaciones de seguridad nacional en torno a TikTok, dijo Gautam Hans, director asociado de la Clínica de la Primera Enmienda de la Universidad de Cornell. Aún así, dijo Hans, "sin un debate público sobre cuáles son exactamente los riesgos (...) es difícil determinar por qué los tribunales deberían validar una ley sin precedentes".

Además de potencialmente infringir los derechos de expresión de los usuarios estadounidenses de TikTok, la ley federal que TikTok está impugnando también implica los derechos constitucionales de Apple y Google, cuyas tiendas de aplicaciones tendrían prohibido tener a TikTok si la prohibición entrara en vigor.

“Esto genera preocupación sobre una intrusión gubernamental potencialmente inconstitucional en las decisiones de estas plataformas con respecto a qué contenido tener”, ​​escribió Jennifer Huddleston, investigadora del libertario Cato Institute, en un artículo de opinión el mes pasado. "Además, podría sentar un precedente peligroso de intervención gubernamental en el espacio online que muchos condenarían en el espacio offline".

Sin embargo, el Gobierno de EE.UU. y más de la mitad de los estados han restringido TikTok en dispositivos gubernamentales, lo que refleja la autoridad que tienen los gobiernos para administrar su propia propiedad. A nivel internacional, TikTok fue prohibida en dispositivos gubernamentales en Canadá, Reino Unido y la Comisión Europea. La aplicación ha estado sujeta a una prohibición total en la India desde 2020.

Algunos funcionarios estadounidenses han estado intentando prohibir TikTok en Estados Unidos desde 2020, cuando el expresidente Donald Trump tomó medidas para bloquear la aplicación mediante orden ejecutiva. (Desde entonces, Trump revirtió su posición, y dijo que una prohibición de TikTok solo ayudaría a Meta, una empresa a la que Trump culpa por su derrota electoral de 2020).

Es probable que el resultado del caso TikTok tenga grandes consecuencias sobre la forma en que el Gobierno de Estados Unidos regula la tecnología y otros discursos extranjeros, dijo Douek.

"Es realmente importante pensar en esto no sólo en términos de TikTok, sino en términos de todas las plataformas extranjeras en el futuro", dijo Douek. “En un mundo globalizado, este tema surgirá una y otra vez. Y si al Gobierno se le otorga el poder de simplemente prohibir una plataforma basándose en lo que en este momento parecen meras preocupaciones sobre posibles daños futuros, en lugar de peligros reales, claros y presentes, eso sería extremadamente preocupante”.